Cuaderno de bitácora, día 10 del confinamiento
Tras definir nuestro plan de comunicación de contingencia para encarar esta inesperada crisis del coronavirus, nos hemos parado a analizar un fenómeno que observamos en varios de nuestros clientes: algunos nos llamaron convencidos desde el minuto 0 de que ahora, más que nunca, tenían que ser visibles en las redes sociales. Otros pensaron que se trata de un gasto a recortar. ¿Un gasto? ¿De verdad crees que la única ventana que te permitirá acceder a los hogares donde se encuentran tus clientes potenciales es un gasto?
Ahora, más que nunca, cuida la imagen de tu empresa en las redes sociales: dependiendo del producto o servicio que ofrezcas, es posible que tus clientes potenciales no puedan comprarte aún.
Pero si mantienes tus redes sociales actualizadas con un contenido interesante, positivo, y que muestre quien está detrás de tu marca, ¡será mucho más fácil que se acuerden de tu marca cuando, el día de mañana, todos podamos retomar nuestra vida normal!
Así que he aquí algunos consejos para cuidar la imagen de tu empresa a través de sus redes sociales:
- Elige bien en qué redes sociales estar según el público al que quieras llegar: ¿clientes particulares? Facebook, Instagram o Tiktok pueden ser tu respuesta, según el rango de edad de tus clientes potenciales. ¿Empresas? Twitter y LinkedIn son buenos canales para mensajes corporativos. Todo depende del mensaje que quieres comunicar y a quién quieres llegar.
- Define una estrategia de comunicación en redes sociales: ir improvisando publicaciones sin un hilo de Ariadna que los una NO-ES-UNA-OPCIÓN. No. En serio. Tus redes sociales tienen que contar una historia: la de tu empresa, de tu equipo, de tus valores. Así es como será única y te permitirá diferenciarte de tus competidores.
- ¿Ya tienes claro la historia que quieres contar? Bájala a tierra: crea un calendario de contenidos en el que definas qué días vas a publicar, qué texto tendrá cada publicación, y qué imagen estará asociada. Anota incluso la hora a la que deberías realizar esta publicación. En este aspecto, te aconsejamos variar las horas de publicación y observar la variación de alcance que tengan para definir la hora óptima para TU contenido
- Constancia, constancia, y constancia: ¡las tres claves del éxito! Mantén una frecuencia de publicación regular para que tus seguidores se acostumbren a esperar tus publicaciones.
- No muestres sólo tus productos o servicios: a nadie le gusta hablar con alguien que SÓLO habla de él mismo, ¿no? Muestra todo lo que es tu empresa: sus valores, su equipo, todos estos detalles que humanizan tu marca, que muestran que detrás de este logo, o esta red social, estáis vosotros, listos para atender a vuestros clientes potenciales.
- Interactúa con tus seguidores: si comentan tus publicaciones, contéstales. Si no lo hacen, ¡anímales a que lo hagan! Crea una comunidad en cada una de tus redes.
- Mide y adapta: si hubiera una receta única de cómo tener una estrategia de redes sociales de éxito, ya te imaginarás que todo el mundo la estaría aplicando, ¿no? La receta del éxito para tus redes sociales es tan única como lo es tu empresa y tus clientes. Así que cada mes mide los resultados de tus redes sociales. Puedes comprobar muchas variables aunque te aconsejamos que mires qué publicaciones tuvieron el mayor alcance (número de personas que vieron una determinada publicación) y engagement (número de personas que interactuaron con una determinada publicación). Tras unos meses podrás sacar un patrón del contenido que realmente le resulta interesante a tu público… ¡y dárselo!
Esperamos que este artículo te ayude a optimizar tu estrategia de comunicación en redes sociales. Recuerda: son la ventana desde la cual tus clientes potenciales pueden verte sin salir de su casa, ¡cuídala!
¡Nos vemos en el próximo post!